viernes, 18 de mayo de 2012


COMER BROTES APORTA ENZIMAS Y VITAMINAS

 El consumo de brotes en la  alimentación es un paso fundamental para  evitar la  acidosis y la  desnutrición.
El procesod e elaboración de los  brotes  es muy sencillo, solo requiere un poco de espacio en la cocina y tiempo para  el alvado y control en el proceso germinativo.
Pero veamos lo que  sucede  en este proceso germinativo y porqué  es tan beneficioso para la  salud.


1- El solo hecho de remojar  las semillas en agua en lo posible  alcalina, conlleva una  serie de cambios químicos que hace  de los brotes una rica fuente de clorofila, enzimas, vitaminas, minerales, proteínas y carbohidratos, necesarios para una correcta  alimentación equilibrada.

2- Durante la germinación, las enzimas se incrementan hasta 20 veces , rico en vitamina B-17, que previenen el cáncer, y B12, indispensable para el sistema nervioso y digestivo. Una taza de germinado tiene hasta 10 veces más vitamina C que un vaso de jugo de naranja, ya  esto es muy importante.

3- Además de lo anterior presenta 20 veces más fósforo que el pescado y contiene vitamina E un poderoso antioxidante también con propiedades anticancerígenas.


4- El consumo de germinados  desintoxica el organismo, eliminando impurezas de los tejidos y de la sangre, fortaleciendo la flora intestinal.

Vida latente

Una semilla tiene como estructuras básicas el embrión o germen y una reserva de nutrientes que serán su alimento para transformarse en planta, envueltos por una cáscara. El embrión es una nueva planta en estado de vida latente, que espera condiciones ambientales y químicas para desarrollarse.

El germinado comienza a partir de la absorción de agua por la semilla, cuya cáscara se suaviza y se hincha, lo que hace que aumente de tamaño. Después de este proceso, la vida de esta se convierte en activa.

Casi cualquier semilla, grano o legumbre puede germinarse, aun aquellas que no se incluyen en la dieta diaria como la de rábano, alfalfa, nabo y col.

Los granos incluyen tres grupos de semillas: 

a- oleaginosas —maní, nueces, almendra y pepita de calabaza.
b- cereales —avena, arroz, trigo, cebada, mijo, sorgo y maíz.
c- leguminosas —frijoles o porotos, soja  verde o porotos mung, arveja, garbanzo y alubias. La mayor parte de estas últimas son difíciles de digerir, pero se pueden consumir en diferentes preparaciones, ideales para  elaborar salteados muy  rápidos o machacarlas. Todas se pueden agregar a ensaladas, sándwiches, licuados de frutas o vegetales o guisos.

Otras ventajas de los germinados es que son de bajo costo, puesto que el volumen de la semilla aumenta hasta cuatro veces o más. Asimismo, para su preparación se utiliza menos combustible, ya que pueden consumirse crudos, porque son de fácil digestión.

Uso terapéutico


Debido a su aporte energético es un alimento ideal para quienes han sido operados o cuando deben reponerse de alguna enfermedad. Araujo también aconseja que niños y deportistas consuman germinados, debido a que sus exigencias físicas y mentales son altas.

Es un alimento geriátrico, ya que el rendimiento corporal tiende a disminuir en los adultos mayores, y la energía de las semillas ayudan a fortalecer su organismo.

Cuando los germinados se combinan, alivian padecimientos de diabéticos y de pacientes con artritis, ya que actúan como antiinflamatorios y estimuladores de la función pancreática.

Costumbre
La base de la dieta de las grandes civilizaciones ha sido uno o más cereales: el maíz para América, el arroz en Asia, el sorgo y el mijo en África y el trigo en Europa. 

El hombre comenzó a hacer germinar los granos, por la facilidad del proceso, antes de conocer sus propiedades nutritivas.
Para muchos, los germinados son una novedad, pero hace cinco mil años ya se conocían en China, en especial, el del frijol de mungo. En la antigua Roma y en Grecia se consumía el germinado de linaza,
como digestivo.

Propiedades de algunas semillas.
Alfalfa: su nombre en árabe significa el padre de todos los alimentos. Es uno de los más completos. Reconstituye la sangre y se recomienda para madres que dan lactancia.
Rábano: es ideal para darle sabor a otros alimentos. Sirve para limpiar el hígado.
Linaza: es un excelente laxante y es fácil de germinar.
Girasol : es una rica fuente de vitamina. Se pueden germinar con o sin cáscara.
Trigo y cebada: tienen un sabor muy dulce. Su almidón se convierte en azúcar durante la germinación.


Mijo: apropiado para las personas celíacas,
ya que sustituye los nutrientes del gluten.


Soya verde o poroto mung: proporciona uno de los más altos niveles de proteína.
Garbanzo: aporta proteínas, fósforo, calcio y hierro.


Lenteja: brinda hierro, zinc, manganeso y vitaminas.

COMO GERMINAR 

Paso a paso
A continuación se describe un método sencillo para germinar semillas en casa.

Materiales
Un frasco de vidrio de boca ancha, gasa fina, o tul, gomas elasticas, agua y semillas orgánicas para germinar.

Paso 1
Colocar las semillas hasta en una décima parte del frasco, bien limpio. Agregar agua hasta cubrirlas.


Paso 2
Tapar la boca del frasco con el tul o la gasa  fina y ajustarla con la  banda  elastica, para que las semillas transpiren y no les caiga polvo.
Paso 3
Lavarlas. Dejar las semillas pequeñas de dos a cuatro horas en remojo. Los granos duros o grandes se remojan de ocho a 10 horas.


Paso 4
Escurrir el agua y dejar el frasco recostado en diagonal, boca abajo, en un lugar con sombra. Lavar las semillas tres veces al día, durante tres días, antes de consumir.


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...